El GP de Las Vegas busca su equilibrio: ¿ha encontrado su lugar en la F1?
Tras un inicio problemático en 2023, la carrera en el desierto de Nevada avanza en la dirección correcta, aunque persisten las dudas sobre su consolidación
El Gran Premio de Las Vegas continúa su proceso de maduración en el calendario de la Fórmula 1. Tras un estreno en 2023 marcado por la espectacularidad desmedida y diversos problemas operativos, la carrera nocturna en el corazón del Strip parece estar encontrando poco a poco su identidad dentro del campeonato mundial.
La segunda edición del evento mostró señales de evolución positiva, aunque persisten las dudas sobre si este Gran Premio ha logrado consolidar su posición definitiva en el ecosistema de la F1. El evento ha sido catalogado como "sold out" por la organización, aunque la Fórmula 1 no ha proporcionado cifras oficiales de asistencia que permitan comparar con las ediciones anteriores.
Esta falta de transparencia en los datos genera incertidumbre, especialmente considerando que en 2023 la asistencia fue de 306,000 espectadores, una cifra que representó un descenso respecto a los 315,000 del año inaugural. Sin confirmación oficial, resulta imposible determinar si la tendencia se ha revertido o si continúa la disminución en el interés del público.
El Gran Premio de Las Vegas representó desde su concepción una apuesta arriesgada para Liberty Media, propietaria de los derechos comerciales de la F1. La inversión inicial fue considerable, con la construcción de instalaciones permanentes y la transformación temporal de una de las arterias más emblemáticas del entretenimiento mundial en un circuito urbano de alta velocidad.
El primer año estuvo plagado de controversias: desde el incidente con la tapa de alcantarilla que dañó el monoplaza de Carlos Sainz durante los entrenamientos libres, hasta las críticas por el enfoque excesivamente comercial del evento, que parecía priorizar el espectáculo de Las Vegas sobre la competición deportiva en sí misma.
Sin embargo, la segunda edición ha demostrado una evolución hacia un equilibrio más adecuado entre el glamour característico de Las Vegas y la esencia competitiva que los aficionados de la F1 demandan. La organización ha afinado los aspectos logísticos y operativos, reduciendo la grandilocuencia que saturó el debut y permitiendo que el deporte recupere protagonismo.
A pesar de estos avances, la pregunta fundamental persiste: ¿ha encontrado Las Vegas realmente su lugar en el calendario de la Fórmula 1? La respuesta dependerá de múltiples factores, incluida la capacidad del evento para mantener el interés del público local y turista, la sostenibilidad económica del proyecto y su aceptación definitiva por parte de la comunidad global de aficionados a la F1.
🔗 Fuente original www.autosport.com